¿Qué ver en Cuba?
Detrás de Cuba siempre hay un suspiro, no sabemos si serán esos coches descapotables de los 40 y 50, las coloridas casas pastel que inundan sus calles, la energía de su gente, sus paradisíacas playas o su significado histórico, pero no hay duda de que la isla es increíblemente atractiva para cualquiera. En esta publicación te invitamos a crear el itinerario perfecto para tus próximas vacaciones y para ello, hemos seleccionado lo mejor que ver en Cuba. Eso sí, antes de partir tenemos que hacerte una recomendación: prepara el equipaje con ropa ligera y fresca, recuerda que el clima en Cuba es cálido casi todo el año y presenta niveles de humedad altos. Dicho esto, ¡A disfrutar!
Comenzamos por La Habana, su capital, centro histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1982 cargado de sabor, ron y son. Más de mil edificios históricos, y cuatro plazas principales, rodean la ciudad; Plaza de Armas, Plaza de la Catedral, Plaza Vieja y la Plaza de San Francisco de Asís. Cada una con su respectivo encanto, si vas con tiempo te aconsejamos que tomes asiento en cada una de estas plazas y simplemente te dediques observar el movimiento de la ciudad.
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Los mejores sitios para visitar en Cuba
En la Plaza de Armas, casi todos los días, se instala un mercadillo de libros; algunos viejos o usados, otros nuevos. Poesía, política, amor o revolución, para gustos colores. La Plaza de la Catedral, antes conocida como la Plaza de la Ciénaga, está rodeada por las antiguas mansiones de la aristocracia habanera. El templo religioso es de estilo barroco y su construcción comenzó en 1748, si tienes la oportunidad te recomendamos que subas a la torre del campanario para unas lindas vistas de La Habana. Para tomarte una rica cerveza artesanal puedes visitar la Plaza Vieja, aunque en el siglo XVI fue utilizada para ejercicios militares, hoy es un espacio donde tranquilamente puedes sentarte a tomar un café y disfrutar de sus fachadas. Por su parte, la Plaza de San Francisco de Asís, la tercera más antigua de la capital cubana, alberga el convento que se ha convertido en museo y centro social.
La Plaza de la Revolución merece un párrafo aparte, con más de 70 mil metros cuadrados, es una de las plazas públicas más grandes, su valor histórico es incalculable. Escenario de acontecimientos principales en la revolución cubana, tiene en el centro el Memorial a José Martí de 112 metros de altura y le rodean oficinas gubernamentales. Esta plaza alberga el famoso mural del Che Guevara, con la frase “Hasta la Victoria Siempre”, es la fachada del Ministerio del Interior. Al este se ubica la Biblioteca Nacional y al oeste el Teatro Nacional. En esta misma línea, si te interesa la historia del país, en definitiva no puedes perderte el Museo de la Revolución.
Muchos turistas coinciden en esto: perderse en las calles de La Habana Vieja forma parte del encanto cultural que te entrega esta ciudad y el país en general. Al recorrer el Prado, un paseo por una avenida arbolada llena de artistas y vendedores callejeros, llegarás al punto de encuentro de muchos cubanos, la Esquina Caliente. No, no es una esquina como tal, pero este espacio dentro del Parque Central, cerca de la estatua conmemorativa a José Martí, es testigo de miles y miles de discusiones diarias por parte de los locales. Béisbol y política, los ánimos se acaloran en esta esquina, aunque en el presente se habla de todo, siempre pasionalmente.
¿Quieres conocer más sobre Cuba?
El recorrido por paseo Prado también nos lleva al Capitolio, uno de los edificios más emblemáticos del país inspirado -entre otros- en el el que está en Estados Unidos, aunque su cúpula es dorada y levemente más grande que la norteamericana. Asimismo, el camino une a esta edificación con el Malecón, un símbolo emblemático de la capital cubana, este paseo marítimo de 8 kilómetros está acompañado de vida urbana y coloridos coches que recorren la ciudad. Otros clásicos de La Habana incluyen una comida criolla y mojitos en La Bodeguita del Medio, o una caminata por la calle Obispo hasta llegar al bar de Hemingway, El Floridita, donde se recomienda tomar un daiquiri. Lo cierto es que La Habana está llena de historia y lugares históricos por recorrer, si tienes tiempo déjate llevar.
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Aunque la capital tiene un gran encanto entre el casco histórico y sus coloridas calles y coches descapotables, Cuba tiene más ciudades altamente recomendables para visitar, además de unos 4.000 cayos, aunque en su mayoría deshabitados. Quienes visitan la isla coinciden en la necesidad de visitar algunos de ellos así sea por un par de días; Cayo de Santa María (el más conocido, con largas playas blancas que se extienden por 10 kilómetros. Recomendamos conseguir alojamiento en el pueblo más cercano para evitar los precios elevados de los resorts en los cayos), Cayo Largo (rodeado de arrecifes de corales y gran variedad de playas, un cayo enfocado en el cuidado y protección de tortugas marinas), Cayo Blanco (el más cercano a La Habana y Varadero), Cayo Guillermo (ideal para buceo o snorkel, cerca de la segunda barrera de corales más grande del mundo), entre otros. Todos están cargados de playas con arena blanca, agua cristalina con intensos tonos turquesa, kilómetros de arrecifes de corales y un enorme mundo submarino por explorar.
Dejaremos las aguas cristalinas de los cayos para centrarnos en otro de los destinos importantes de Cuba, Varadero. A 150 kilómetros de la capital, poco más de 2 horas en coche (aunque también se puede llegar en taxi o transporte público), esta ciudad que promete completa desconexión ante la belleza de sus paisajes tiene más de 20 kilómetros de playa con arenales de aguas cálidas. Además de la playa y el turismo local, recomendamos visitar la Cueva de Saturno, una caverna con una piscina natural de 18 metros de profundidad cubierta de estalactitas y con agua cristalina. Cuidado, a diferencia de otras aguas de Varadero ésta no es precisamente cálida.
Un poco más alejado de La Habana, a 4 horas aproximadamente, está una ciudad colonial y colorida reconocida como Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en 1988, Trinidad. Las calles empedradas de esta localidad mantiene su esencia, las paradas obligatorias turísticas se remiten a la Plaza Mayor, la Iglesia Mayor de la Santísima Trinidad, el Museo de Arquitectura Colonial y el Museo de Historia Municipal. Dato: subir a la azotea te dará una vista panorámica de la ciudad. Otras ciudades como Santiago de Cuba, Viñales y Cienfuegos también forman parte de las localidades más visitadas del país. Aunque, como en gran parte de esta isla caribeña, más allá de las clásicas paradas turísticas, el mejor consejo que podemos darte es que te atrevas a recorrer sus calles, disfrutes de las vistas y te dejes llevar por la energía, el son y sabor de su gente.